Seguro que tienes algún objetivo en mente que estés intentando conseguir, aquí te dejamos una pequeña lista de cosas que debes tener en cuenta para que puedas llevar a buen puerto cualquier objetivo que tengas en mente. Eso sí, siempre que sea un objetivo realista y que de verdad se pueda alcanzar desde la posición en la que te encuentras en estos momentos. No pienses en comprarte tu piso soñado en la capital de tu país dentro de dos meses si estás viviendo en casa de un familiar porque el presupuesto te limita.
Por supuesto, puedes lograrlo con el esfuerzo y las metas adecuadas. Pero llevará su tiempo, no pasará de inmediato y eso hay que tenerlo claro. Y dicho eso, comenzamos con estos 5 consejos para que puedas lograr tus sueños o al menos acercarte a ellos de una manera realista. ¡Y cuéntanos que opinas al acabar!
Considera que te va a llevar más tiempo del que creías.
Hay ocasiones en las que nos planteamos conseguir algún objetivo pero después de un tiempo nos rendimos. Resultaba demasiado complicado o requería un esfuerzo mayor del que esperábamos en un principio. No fracasamos porque sea imposible de lograr, sino por rendirnos antes de tiempo.
Si de verdad quieres conseguir tu objetivo, deberás ser realista y suponer que te va a llevar más tiempo del que tenias pensado. Deberás aceptar la idea de que supondrá más esfuerzo y dedicación del que en un principio pensaste que ibas a necesitar dedicarle. Ten siempre en cuenta que la perseverancia es una de las claves del éxito.
Persevera para lograr tu objetivo. Sigue intentándolo hasta conseguirlo.
La perseverancia es uno de los factores más importantes que deberás tener en cuenta cuando quieras conseguir un objetivo. La perseverancia te permite superar obstáculos que a primera vista parecen no tener una solución sencilla y que en ocasiones, no la tendrán.
Para prácticamente todo hay una solución posible, quizá no la puedas ver en un primer momento y necesites fallar varias veces antes de pensar una manera alternativa que sí te pueda dar resultado.
Divide tu objetivo en objetivos más pequeños.
Si tienes un objetivo a medio / largo plazo, aparecerán imprevistos que tendrás que resolver según vayan surgiendo. Dividiendo un objetivo en partes más pequeñas podrás hacerles frente a los problemas que vayan apareciendo de una forma mucho más eficaz. Si lo divides todo en partes más pequeñas que puedas digerir una por una la sensación de éxito será mayor y tendrás la sensación de estar avanzando hasta tu objetivo.
Por eso es vital dividir un objetivo en pequeñas metas que te llevarán hasta lo que tienes en mente. Además, enfrentar los conflictos uno a uno ayudará a evitar que la situación te desborde. Tener paciencia y dedicarse a una sola cosa cada vez te dará más control sobre ti mismo/a.
Si lo necesitas, tomate un tiempo para recuperar fuerzas y sigue intentándolo.
Si te ves abrumado por los problemas, desconecta el tiempo que necesites descansar y recuperar energías. No sirve de nada presionarse sino es necesario. Obsesionarse con conseguir que las cosas salgan adelante sí o sí puede hacer que cometas errores por intentar terminar lo más rápido posible.
Si lo estabas haciendo bien, aumentar el ritmo puede hacer que pierdas más de lo que ganes. Es mejor alejarse un poco de vez en cuando para ver la situación con perspectiva y no agotarse en el proceso de alcanzar tu objetivo.
Olvídate de los demás. Compites contigo mismo.
Posiblemente conocerás más gente que quiere conseguir lo mismo que tú y les mirarás para tomar una referencia de si estás avanzando lo suficiente o no. Olvídate de ellos. Son tus metas, no las suyas. Sigue tu propio ritmo, si quieres seguir el ritmo de otra persona te sentirás frustrado/a.
Aquí lo que importa no es quién lo logra antes, sino llegar a tu meta. Cada cual tiene su ritmo, y lo importante, es llegar a la meta. No es una carrera de velocidad, es una carrera de resistencia. Olvídate de los demás, y fíjate en la meta que tú te has marcado.
